En diciembre de 2023, luego de admitir que terminaba su primer año de gestión “en la cola” en ejecución de gasto, el gobernador regional de Áncash, Koki Noriega Brito, hacía la promesa de revertir esa situación y mostrar “resultados” en 2024. Sin embargo, al cierre del primer trimestre de su segundo año, los “resultados” todavía están lejos de ser exhibidos, pues su gestión sigue en la zaga.
En efecto, de acuerdo con el portal de Transparencia Económica del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), el Gobierno Regional de Áncash (GRA) se ubica en el último lugar de todos los gobiernos regionales del país en la ejecución de su presupuesto para proyectos de inversión, es decir, obras.
Un vistazo a la plataforma informativa del MEF — de libre y fácil acceso— muestra que el GRA cuenta por el momento con un Presupuesto Institucional Modificado (PIM) de 605.8 millones de soles para la ejecución de obras. De ese monto, al cierre del trimestre enero-febrero-marzo de 2024, la cantidad gastada es de 40.1 millones de soles, lo que representa exactamente el 7 %.
Ese porcentaje lo sitúa en el último lugar de la lista de 25 gobiernos regionales, más la Municipalidad Metropolitana de Lima. El Gobierno Regional de Ayacucho lidera la ejecución de gasto: de sus 635.6 millones de soles, ha gastado hasta el momento 194 millones (36.8 %). En segundo lugar, aparece el Gobierno Regional de Junín, que de sus 797.7 millones de soles ya gastó 134.7 millones (36.7 %). El tercero de la lista es el Gobierno Regional de Loreto, cuyo presupuesto para obras es por el momento de 1068 millones de soles y ya ha gastado 158.5 millones (20.6 %). Nótese que los tres gobiernos subnacionales que lideran la ejecución de gasto tienen más presupuesto que el GRA. ¿Qué los diferencia de la gestión de Koki Noriega que allá tienen mejores resultados?
El pasado año 2023 el GRA también había terminado último en ejecución presupuestal, a pesar de que transfirió más de 250 millones de soles a las municipalidades. De los 830 millones de soles que tenía inicialmente como PIM, luego de las transferencias a los gobiernos locales se quedó con 568 millones. Al cierre del año, terminó ejecutando el 39.3 % de ese dinero, lo que le valió acabar en la cola de todos los gobiernos regionales del país. “Terminamos en la cola, sí, lo he meditado tantas veces. Cómo es posible… Pero será un reto revertirlo en el año 2024”, había prometido el gobernador Noriega Brito el 19 de diciembre del año pasado durante la presentación de un informe de gestión.
La cantidad de dinero que el GRA no gastó pasó como saldo de balance para este año 2024. Eso se suma al monto que recibió en enero pasado como adelanto del canon minero. Así, el GRA suma 605 millones de soles de Presupuesto Institucional Modificado (PIM)… por el momento. Y es que esa cifra aumentará en julio cuando reciba la segunda y última transferencia, luego de la regularización del Impuesto a la Renta (IR), que genera la base de cálculo del canon minero.
