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viernes, abril 19, 2024
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Áncash: Otto Guibovich mintió al JEE respecto a su formación académica y aprovechó la pugna en AP para «pasar piola»

Otto Guibovich Arteaga, candidato de Acción Popular (1), tiene un proceso de exclusión en curso en el Jurado Electoral Especial de Huaraz (JEE), es así que el día 10 de Enero del presente, el Fiscalizador de Hoja de Vida del JEE – Huaraz, emite el informe N° 04 – 2020 – RVDB –FHV – JEE – Huaraz/JNE, advirtiendo a la Presidenta del JEE, Melicia Brito Mallqui, que el Sr. Otto Guibovich, no cuenta con registro en la SUNEDU, respecto a su formación académica, éste informe que ya circulaba en el JEE, era el principio de su caída, de un suicidio político que él mismo había generado al brindar información falsa en su Hoja de Vida y tenía que “pasar piola”.

Esto puso nervioso al candidato en cuestión y le salió lo cachaco. Armó la estrategia para que su caso pasara desapercibido y preparó la “Cortina de Humo” para distraer al electorado. Aprovechó la pugna interna en el partido de la Lampa, respecto al liderazgo nacional, buscó el chivo expiatorio y lanzó el bombazo para matar dos pájaros de un solo tiro.

El escenario era perfecto: La llegado del excongresista Yonhy Lescano Ancieta, opositor de Alfredo Barnechea García, a quién Otto Guibovich respalda, era la jugada que en toda su vida de ponzoña había soñado, se unió a la familia Duran Cotillo, quienes se declaran abiertamente “Barnecheveres”, la atención estaba centrada en la visita del excongresista a quién pretenden enlodar y destruir al candidato con el N° 2 del mismo partido, Carlos Miranda Arroyo, a quién lo petardearon sin remordimiento, utilizando la figura de una dama para hacerla víctima de una amenaza y una propuesta “indecente”, que no sabe cómo probar.

Como si se tratará una invasión Norteamericana a Irán, Otto necesitaba el camuflaje para evadir sospechas, utilizó el arma más sublime, Eifilin Ríos Durán, así presentarla como víctima y él como el canalla escondido tras las faldas de una dama y provocar la mirada del electorado para crear un boumerang, que podría sumarle los votos a ambos e impedir que sea visto como el nuevo Yesenio Ponce de la Política Ancashina.

No es la primera vez que Guibovich Arteaga apela a este mecanismo de traición para hacerse notar, ya lo había mostrado el 4 de diciembre del 2008 cuando fue nombrado Comandante General del Ejército del Perú,​ mediante resolución firmada por el Presidente de la Republica (Alan García Pérez) a propuesta del Ministro de Defensa. En la ceremonia de su reconocimiento, desarrollada en la sede del Cuartel General del Ejército, ubicado en el distrito de San Borja, no dudó en darle la puñalada a su mentor y entonces Ministro de Defensa, Antero Flores Araoz, al enfatizar que los “militares nunca deben participar en temas políticos” y que en ese sentido manifestó “Quiero establecer un claro compromiso de deslinde, pues el poder de las armas tienen una razón constitucional y nunca más deben injerir en temas políticos”. Se refirió que la espada del militar es un símbolo de honor y que se mancha cuando apunta al corazón de la democracia.

Su carácter violento, al parecer, se refleja no sólo en la estrategia por ganar a cómo dé lugar una contienda electoral, si no que fue denunciado por agresión física, contra un miembro del Ejército Peruano y tiene una serié de cuestionamientos a su paso por esta respetable institución castrense.

“La conducta mejora antes de empeorar”, escribía con cierto convencimiento en uno de los artículos en su faceta de analista político, citando “las leyes de la quinta disciplina” en ella cuestionaba la consabida “puerta giratoria” donde la policía captura, el fiscal denuncia y algún juez libera para que el policía empiece otro costoso proceso de captura, arriesgando sus vidas.

Esa forma de combatir el crimen no sirve, pues del alivio temporal pasaremos al agravamiento posterior con mayores costos materiales y fundamentalmente vidas y es imposible continuar así.

Hoy pareciera una frase aplicable al candidato ya que “su conducta parece mejorar antes de empeorar”, es así que el excomandante general del Ejército, Otto Guibovich Arteaga llega a las elecciones congresales con un pasado cuestionable y un presente sospechoso. Y es que apenas el 25 de setiembre del 2019, la Segunda Fiscalía Especializada en Delitos de Corrupción de Funcionarios, pidió la continuación de diligencias preliminares contra Otto Guibovich y otros 3 militares por el presunto delito de negociación incompatible y colusión en agravio del Estado peruano.

La investigación del Ministerio Público parte de la denuncia penal presentada por la Procuraduría Pública Especializada en Delitos de Corrupción de Funcionarios basada en los hallazgos documentados en un informe del Órgano de Control Institucional del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas. Los hechos irregulares giran en torno a la negociación frustrada entre el Ejército peruano y la empresa estatal china North Industries Corporation (Norinco) de 5 tanques de combate principal MBT – 2000, que podría devenir en un delito de traición a la patria.

La vergüenza que cargamos los ancashinos con personajes cuestionables en el poder, debería ser una invitación a la madurez en el voto, separar la paja del trigo y elegir autoridades que nos representen dignamente y nos devuelvan la esperanza de un futuro mejor para todos los peruanos. (NL)

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