Santos Clemente Cervantes Torres para quien el Ministerio Público había solicitado cadena perpetua por el delito de violación en agravio de dos menores, se salvó de la pena máxima, pero de todas maneras pasará 20 años tras las rejas.
La Segunda Sala Penal de Apelaciones no lo encontró responsable del delito de violación, pero si de actos contrarios al pudor en agravio de una menor de 12 años y de otra de 10 años cometidos el año 2011.
La menor agraviada de 10 años resultó ser hija de su entonces conviviente y la menor de 12 resultó ser hermana de la misma conviviente. Los abusos sexuales fueron cometidos en la vivienda donde vivían y cuando la ex pareja se ausentaba de la casa.
El fiscal superior que llevó el caso Germán Soto Ruíz había presentado pruebas documentadas como examen médico legal para demostrar que si se había cometido el acto de violación a las dos menores. Sin embargo, por alguna contradicción en las víctimas la sala de apelaciones consideró que lo cometido fue actos contrarios al pudor.
Los magistrados condenaron a Santos Cervantes Torres a la pena de cárcel de 20 años y al pago de 2,500 soles por concepto de reparación civil en favor de las agraviadas que ahora son mayores de edad. Esta sentencia condenatoria no satisfizo al fiscal superior Germán Soto Ruíz quien planteó nulidad a la sentencia.
El procesado se encuentra internado en el penal de Cambio Puente desde hace varios meses en que fue capturado.
