Mientras las largas colas por lograr obtener un cupo de atención en los viejos hospitales y centros de salud de la región, sumados a ellos la carencia de medicinas por el desabastecimiento que tienen en sus almacenes y farmacias salió a la luz una denuncia de vacunas vencidas por no haberse distribuido a tiempo en los almacenes de la DIRESA.
La Defensoría del Pueblo informó a la prensa, el hecho escandaloso ocurrido en el sector, con la denuncia de la pérdida de más de 14 mil ampollas las mismas que le costaron a todos los ancashinos más de 70 mil soles, lamentablemente dichas ampollas no fueron distribuidos a tiempo a los hospitales y centros de salud de Ancash.
Si esto hubiera ocurrido, dichas ampollas pudieron haber sido usados en favor de la salud de los usuarios que hacen largas colas para ser atendidos en el dolor de su salud, pero la Dirección Regional de Salud de Ancash, donde se descubrieron estas ampollas con fechas de vencimiento, no se distribuyeron por los permanentes cambios de directores regionales de salud Ancash.
Estos son los resultados de la gestión regional que provocó el hoy preso, Waldo Ros Salcedo, quien por satisfacer no la salud del pueblo, sino aparentemente su enfermizo poder de mesiánica, termino con este nuevo escándalo, la pregunta que todos hacen, ¿Ahora, quien responde por este escándalo?. (HN)
