Uno de los patrimonios culturales que enorgullecen a la provincia es la «Chicha Huarmeyana», dentro de los invitados a una exhibición denominado «Historia y Tradición» de nuestro patrimonio cultural provincial, fue la señora Eudolia Beltrán Gamarra, conocida por todos como «Dula» una de las dos o tres «chicheras» que mantienen aún la herencia de generaciones, en la elaboración de la «Chicha Huarmeyana» en nuestra provincia de Huarmey.
En su elocución la señora «Dula», agradeció este noble gesto de ser considerada la única «chichera» que mantiene aun esta tradición, pues las otras familias han dejado de fabricar esta bebida ancestral. Además trasmitirá sus conocimientos de la preparación a sus familiares para no perder esta tradición.
De igual forma aclaró que «una cosa es ser productor de maíz de jora y otra es ser la que elabora la chicha, dando una charla magistral de las cantidades e insumos que se necesita en su elaboración, pues es necesario respetar las medidas para que el producto final sea el mejor».
Los presentes en esta exhibición le dieron la razón, a la «chichera» Dula, pues degustaron el verdadero sabor de la chicha huarmeyana; «tiene el dulzor en su punto y ese color marrón oscuro característico de esta bebida», manifestó un huarmeyano de antaño.
La señora «Dula» manifestó que hace un mes preparó una «carga de jora» para cumplir un pedido especial de un grupo de amantes de la verdadera «Chicha Huarmeyana».
Como se recuerda la «Chicha Huarmeyana» era la bebida oficial del Inca en las ceremonias del Inti Raimy, y era trasladada especialmente desde el Valle de Huarmey hasta la capital del imperio incaico en el Cusco.
Otro de los amantes de la «chicha Huarmeyana» fue el presidente del Perú en la década de los años 20 del siglo pasado, Augusto B. Leguía, quien solía compartir con sus amigos y dignatarios en Palacio de Gobierno. A Leguía se solía llevar su chicha huarmeyana hasta la misma Casa de Gobierno.
Desde Áncash al Día, felicitamos a esta heredera de una tradición milenaria, y que siga trasmitiendo a sus generaciones para no perder la verdadera preparación de la «Chicha Huarmeyana».
