El jefe de la Macrorregión Policial de Áncash, Fredy del Carpio Sotelo, aseguró que los suboficiales Roger Quijano Bedón y Frank Manrique Romero, quienes fueron secuestrados el último viernes por comuneros de la provincia de Huaylas, no han robado a los pasajeros de un camión en el distrito de Pueblo Libre.

El general del Carpio dijo esto luego de que German Milla López, dueño de un camión, denunciara ante la comisaría de Quillo que dos hombres a bordo de un vehículo negro como el que manejaban los policías, dispararon contra su unidad y robaron a sus pasajeros en el sector de Atepampa, en el distrito de Pueblo Libre.

El oficial afirmó que el transportista presentó su denuncia el domingo pasado en represalia contra los agentes del orden, quienes el viernes por la tarde intervinieron su unidad para verificar si trasladaba drogas y o personas prófugas de la justicia.

Según del Carpio, Milla López acusó a los policías de robo e instigó a los comuneros para que los golpeen y torturen. Además, con ayuda de los pobladores subió a su vehículo el auto de los policías con el fin de quemarlo.

“No hay robado absolutamente nada, ese mismo día, la fiscal tomó las declaraciones y dijeron que no les habían robado”, aseveró.

Del carpio comentó que durante el proceso de diálogo que mantuvo con los pobladores de la Comunidad Campesina de Río Ruin, la fiscal Sindy Cruzalegui Roque, de la Segunda Fiscalía Penal de Huaylas, tomó las declaraciones a los pasajeros, quienes manifestaron que no les robaron.

Respecto al impacto de bala que figura en el parabrisas del camión, el general afirmó que el conductor no estuvo en el vehículo y que, según la trayectoria del proyectil, habrían dispararon de adentro para afuera, ya que no hay ninguna marca en el asiento del piloto.

Finalmente, ante esa denuncia, informó que la Inspectoría de la Policía de Chimbote ha iniciado un proceso disciplinario administrativo contra los custodios a fin de esclarecer los hechos.