La Minera Antamina, en los últimos meses viene enfrentando serios cuestionamientos sobre la efectividad de su política de Gestión Social y relacionamiento comunitario con sus zonas de influencia directa e indirecta.
A pesar de los premios recibidos a nivel corporativo, como Empresa Socialmente Responsable, esta acción no se ve reflejada en el entorno de sus operaciones, como por ejemplo, los poblados vecinos a su puerto Punta Lobitos, en el distrito y provincia de Huarmey, especialmente en las comunidades de Puerto Huarmey y 9 de Octubre, donde se denunciaron personas con altos niveles de contaminación por metales pesados como arsénico y plomo.
Aquí, el trabajo de relacionamiento comunitario de la empresa Antamina fue de interponer denuncias penales y cartas notariales de amedrantamiento; en vez de construir con la población, relaciones de confianza de largo plazo, y virar a un enfoque de apoyo social y tenerlos como aliados estratégicos.
En el campo de la inversión social con la provincia no hay nada destacable, solo está el préstamo al Estado por adelanto de pago de impuestos, a través de la modalidad «Obras por Impuestos», en proyectos del nuevo hospital de Huarmey y el proyecto de saneamiento integral, después no hay nada desde hace 4 años.
En más de 25 años de funcionamiento del puerto de embarque de minerales de Punta Lobitos, no existe algún proyecto de envergadura que la población lo recuerde como una inversión social sostenible y atrayente de nuevos capitales para el desarrollo de la economía local.
Para el personal de Gestión Social – Huarmey, en estas dos últimas décadas, las relaciones comunitarias se basan solo en acciones asistencialistas, sin estrategias de análisis que realmente aseguren la sostenibilidad de grandes proyectos, que deberían de ser los ejes de desarrollo económico de la provincia o área de influencia, y genere un verdadero desarrollo sostenible de la comunidad local.
DENUNCIAS DE CONTAMINACIÓN EN COMUNIDADES VECINAS A SUS OPERACIONES
Antamina ha respondido a las acusaciones de contaminación en Huarmey y San Marcos, asegurando que sus monitoreos ambientales no han detectado niveles de arsénico por encima de los límites permisibles. Sin embargo, las comunidades locales y organizaciones como la Red Muqui cuestionan la transparencia y la efectividad de estos monitoreos, señalando que los resultados no reflejan la realidad de la situación in situ. Cabe resaltar que el OEFA en su último informe hecho público, ya se pronunció y señala a la planta de efluentes de Punta Lobitos como fuente de emisión de partículas fugitivas de metales pesados.
CONCLUSIÓNES
La situación en Huarmey, Valle Fortaleza (con graves problemas en el poblado de Anta, en Paramonga), la provincia de Bolognesi y comunidades campesinas de San Marcos, vecinas a las operaciones del campamento de Yanacancha, pone en evidencia la necesidad de un replanteamiento de sus políticas de Gestión Social más humana, más efectiva y con compromisos a largo plazo por parte de Antamina.
Es urgente, que el CEO y gerente general de la minera Antamina, Adolfo Heeren, redireccione a la empresa y no solo debe enfocarse en su rentabilidad financiera sino también en su RENTABILIDAD SOCIAL, y que asuma su Responsabilidad Social y ambiental con sus vecinos.
Cada empresa desarrolla sus políticas en base a la información recibida y el CEO las ejecuta con su toque de personalidad, por eso le ponemos en consideración estos consejos aquí esgrimidos, porque es el sentir de la población huarmeyana; no es algo inexistente, o inventado, es la realidad, y tal vez diferente a la información que acostumbra recibir de su oficina de Gestión Social-Huarmey.
En Huarmey, nadie es antiminero, solo que, por falta de una comunicación corporativa efectiva con la comunidad y los medios locales, nos hacen sentirnos una población relegada y engañada por ustedes.
La PAZ SOCIAL es resultado de la generación de confianza verdadera a largo plazo, no se puede subestimar a un pueblo de más de 40 mil habitantes. Solo en contadas ocasiones, se ve a las empresas dispararse a los pies y dinamitar su gestión a largo plazo.
No es posible señor Heeren, que la prensa local de Huarmey, se entere que usted llegó a HUARMEY a escondidas para supervisar el estado de los trabajos del hospital de Huarmey (con 2 años de retraso) y del proyecto de Saneamiento Integral (más de 1 año de retraso), sin presentarse ni dialogar con las autoridades locales, ni mucho menos brindar una entrevista a la prensa local.
Ya lo hemos dicho una y otra vez, ¿Porqué tienen tanto miedo a la prensa huarmeyana? ¿Porqué el personal de Gestión Social de Huarmey lo esconden y no quieren que sepamos que usted llega a Huarmey?
Le están haciendo caer en un grave error, CEO y gerente general de Antamina, porque tarde o temprano nos enteramos que usted estuvo por Huarmey, una zona de influencia directa de las operaciones de Antamina, porque por el puerto Punta Lobitos ustedes envían su concentrado de minerales a los diversos países del mundo.
¡Genere confianza y no haga lo mismo que hizo su antecesor Víctor Gobitz!
Por: Lic. YURI MEJÍA MORANTE.
