La apertura inapropiada de la compuerta de la laguna Pelagatos por parte de la autoridad municipal ha generado graves consecuencias en Pampas.
Aunque la medida buscaba reducir el nivel del agua, el cierre se ha vuelto imposible. Los pobladores temen perder por completo la laguna y demandan la intervención de la Fiscalía y la Defensoría del Pueblo.
En abril, el COER de Áncash había advertido sobre el riesgo de desembalse debido al debilitamiento del dique de seguridad y las intensas lluvias. Se estima que 216 viviendas y 448 residentes están expuestos al peligro, además de puentes, colegios y extensas áreas de cultivo.
La apertura antitécnica de la compuerta ha sido atribuida al alcalde Abraham Juárez Gabriel, según videos compartidos por los afectados. La agricultura local podría sufrir un impacto negativo si la situación persiste.
Es crucial que la Fiscalía y la Defensoría del Pueblo tomen acciones inmediatas para abordar esta emergencia y proteger a la población afectada.