La Contraloría General alertó al hospital Víctor Ramos Guardia de Huaraz que sus servicios presentan hacinamiento que comprometen la seguridad y la salud de los usuarios y del personal médico. Asimismo, se observó que gran parte del equipamiento médico se encuentra obsoleto e incumple los estándares modernos de calidad, lo cual limita la capacidad para ofrecer diagnósticos precisos y tratamientos eficaces y oportunos.
Mediante el Informe de Visita de Control n.° 001-2025-OCI/0830-SVC, realizado el 21 de enero del presente año, se advierte, por ejemplo, que el servicio de Nutrición presenta cables expuestos, servicios higiénicos y utensilios en muy mal estado, así como campanas extractoras, marmitas y freidoras sin funcionar.
Del mismo modo, el servicio de Desarrollo y Crecimiento tiene un ambiente hacinado por cajas apiladas y el área de Ginecología presenta condiciones inadecuadas de limpieza y un ecógrafo inoperativo. Además, carece de utensilios para los instrumentos utilizados colocando algunos de ellos en tinas de plástico.
La caldera que provee de vapor y agua caliente para diversas actividades propias del nosocomio presenta serios problemas por la falta de mantenimiento, lo cual, por ejemplo, impide la esterilización de los instrumentos médicos y ropa. Esta situación ha ocasionado retrasos en la programación de operaciones y ha obligado a requerir el servicio de esterilización a una clínica particular generando gastos adicionales al hospital.
El área de Cardiología presenta deficiencias en la ventilación, además requiere de un tensiómetro aneroide rodante operativo. De igual forma, los servicios de Otorrinolaringología, Neumología, Odontología, Urología, entre otros, funcionan en espacios pequeños, en algunos casos con falta de iluminación adecuada, ventilación y carecen de equipamiento apropiado.
También urge la contratación de mayor personal médico y técnico en servicios de Medicina Física, Rehabilitación y Oftalmología. De igual forma, se necesita personal capacitado en Odontología, Ecografía General y la Unidad de Cuidados Intensivos, en este último se requiere otra área de hospitalización, Rayos X y Tomógrafo, para evitar la contaminación y/o el contagio entre pacientes.
Las instalaciones del servicio de Emergencia han quedado reducidas debido a la alta demanda de atención. Su laboratorio no cuenta con reactivos de amilasa y Lipasa, tampoco tiene camillas suficientes para atender a las personas en reposo. El equipo de rayos X del departamento de Diagnóstico por Imágenes permanece malogrado desde el 23 de octubre debido a la falta de mantenimiento.
El informe fue notificado al director ejecutivo del hospital Víctor Ramos Guardia para la adopción de medidas preventivas y correctivas de manera urgente y prioritaria.
