Un informe del programa Panorama ha revelado que el actual máximo Jefe policial, el General de la Policía Nacional del Perú, Óscar Arriola Zanabria, ha sido señalado como parte de una red de corrupción vinculada a la minería informal en el sur del país.
Según la declaración de un colaborador eficaz ante la Fiscalía, cuando Zanabria ejercía funciones como jefe policial en Arequipa, habría recibido pagos ilegales tanto de la minería informal como de la formal. Los sobornos no solo habrían sido en efectivo, sino también en minerales. La información se encuentra ya en manos del Ministerio Público, que ha iniciado diligencias preliminares.
Esta revelación plantea serias dudas sobre la integridad de quienes hoy tienen bajo su mando la lucha contra el crimen organizado. ¿Y si el mismo patrón se repite en regiones como La Libertad, donde por años se ha hablado de una famosa «bolsa» que operaría bajo mecanismos similares?
La lucha contra la criminalidad no puede estar en manos de quienes podrían estar del lado contrario de la ley.

